En USA en 2016 el porcentaje de empleados que trabaja en casa con cierta frecuencia era del 43%, generando así, una mayor flexibilidad, conciliación familiar, mayor motivación del equipo y de cara a la compañía ofreciendo un ahorro en costes como desplazamientos, dietas…. Evidentemente, todo ello enfocado a encontrar que el empleado consiga tener una mayor productividad, sin embargo, según el gráfico siguiente, el mapa de trabajo desde casa en Europa en 2018 es muy distinto a los números de Estados Unidos.

Estos datos de Norteamérica, un mercado que siempre lleva un adelanto de varios años frente a Europa, nos indica de la importancia de cambiar el diseño o tipología de nuestras futuras viviendas, donde un espacio para trabajar, seguramente se hará indispensable y donde se tenga que hacer de manera obligada, una escucha activa al cliente, quien decidirá de manera muy personal este nuevo diseño de hogar, 100% adaptado a sus necesidades
Del mismo modo, tener un barrio que ofrezca servicios de valor a los vecinos, se hará indispensable, especialmente con las nuevas generaciones que ya son hiperconectadas, donde la cooperación y las relaciones interdependientes se harán necesarias para la mejora de la sociedad.
Sin duda, parece que además esta situación actual ayudará a dar ese empujón definitivo a que el sector inmobiliario se industrialice. Hay empresas como Inhaus, o incluso Aedas que ya se están sumando a este cambio.
Es inevitable ver que el futuro a medio plazo ya está cambiando, y las empresas dentro del sector que no tengan capacidad de adaptación, terminarán desapareciendo.
Cuídate.